6.04.2010

Butterfly Treasures

Sentada, Scarlet pensaba.
Todo lo que la rodeaba hacía que se sintiese como en un cuento de hadas.
Su vida aparentemente perfecta estaba llena de imperfecciones. Pero eso a ella no le importaba en absoluto.
Al contrario que las demás chicas de su edad, Scarlet siempre lucía una bella sonrisa en la cara que potenciaba aún más el brillo de sus ojos azules.
Al viento le gustaba jugar con su largo pelo ondulado de color del oro.
Bueno, al viento y a Adam, el príncipe azul de Scarlet. Su Romeo personificado.
El único que aceptaba su peculiar personalidad acompañada de sus virtudes y defectos.
El que la consolaba cada vez que lo necesitaba.
El que le daba besos de chocolate y le endulzaba el día.
El único le enviaba rosas rojas por su cumpleaños y siempre.
El único que la abrazaba de verdad, que la protegía, que la amaba.
El primero que le envió una carta seguida de un P.D.: Te quiero
Scarlet seguía en aquel precioso lugar, cuando una mariposa de colores muy llamativos se posó en sus finos dedos.
En ese momento Scarlet recordó a Adam y todas las cosas que la hacían feliz y se sintió como una auténtica princesa…

6 comentarios:

Saii dijo...

ayy ke lindo.. me identifico con ella !!! :))

Sara Bellamy dijo...

jooo, que bonito
:'(
me entran ganas de llorar!
dios, como de esa cabecilla pueden salir cosas tan bonitas como esta?
:DD

Mónica dijo...

Así nos gustaría sentirnos a más de una!!!! Un beso Alba

Bittersweet Bali | Cora Caldentey Muriel dijo...

Precioso! :) Me cae bien Adam... ^^

Un Beso!

Hollie Deschanel dijo...

¡Pero es que todas somos princesas! Con distinto cuento, pero princesas, a fin de cuentas.

Beso :)

Veró dijo...

Adam me recuerda a Especial :B
Que lindo , amo el nombre Scarlet.
Miles de abrazos
Fukuro