Una y otra vez.
Ayer, hoy.
Cada semana.
Cada segundo en mi mente.
No puedo mirarte sin querer besarte.
Sin quererte.
Y vas tú y me sonríes todo el rato.
Y me cuentas chistes.
Y vuelves a sonreír.
Y tus ojos se llenan de brillo.
Y mi corazón de amor.
Y entonces es cuando todavía te quiero más.
Y ese es el momento en el que deberías besarme.
2 comentarios:
Jo que bonito :)
Gracias Lexy :)
Publicar un comentario